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Finalizan las obras con cargo a la ITI de conservación y restauración en el Oppidum de Puente Tablas

Finalizadas las obras en el enclave arqueológico de Puente Tablas, en la ciudad de Jaén. Se trata de una intervención financiada a través de la Inversión Territorial Integrada (ITI) de Jaén, con un presupuesto total cercano a los 300.000 euros. Este proyecto ha supuesto la ejecución de actuaciones de conservación y restauración de este patrimonio arqueológico, que cuenta con la categoría de Bien de Interés Cultural. Los trabajos se han desarrollado en el santuario, palacio y área residencial, además de llevarse a cabo labores de limpieza de superficies, tanto en muros como en pavimentos.

Paralelamente, esta actuación sobre el enclave arqueológico ha incluido la aplicación de herbicidas y fungicidas para evitar daños en las estructuras murarias, el emplastecido de elementos; apertura de calas en muros para evacuación de aguas, así como reposición de elementos perdidos, con diferenciación de reintegraciones y tratamiento de los restos para su presentación pública. Además, se ha mejorado el acceso al recinto y elementos de las instalaciones del Centro de Interpretación, también los accesos al yacimiento arqueológico, desde el Centro de Interpretación y la entrada principal.

El poblado íbero de Puente Tablas se desarrolló entre los siglos VII y finales del III antes de Cristo. Antes de ese momento, entre los siglos IX-VII antes de Cristo el lugar estaba habitado. Aquel primitivo poblado carecía de murallas y sus viviendas eran cabañas sencillas y sin organización precisa entre ellas. En torno al siglo VII antes de nuestra era (hace 2.700 años) el poblado se transforma y se incorporan nuevas formas de construcción. De este modo, se levanta en su perímetro una muralla y dentro del recinto se traza una trama urbana con casas y espacios públicos donde se instala un palacio para el príncipe y, varios siglos más tarde, un santuario. Aunque el lugar era bien conocido como un antiguo poblado, no fue objeto de atención por la arqueología hasta los años 70, de forma puntual, y de forma más continua, hasta los años 80 del pasado siglo, cuando la Universidad de Jaén puso en marcha un proyecto de investigación sobre el mundo íbero en la Campiña de Jaén.